Podcast de Amida Shu 104: 30 de octubre de 2020: traducido por Nando Maril

Introducción al podcast

Aquí está el podcast de hoy. Se refiere a los votos del Bodhisattva Dharmakara en el Sutra más Largo de Tierrapura, especialmente los votos 44 y 33.

☯      ☯      ☯

En podcasts recientes he hablado sobre los votos hechos por el bodhisattva Dharmakara, y también sobre la salmodia, la canción y el espíritu extático en el Budismo. Estos dos temas se unen en el 44.° Voto hecho por Dharmakara, donde dice:

“Oh Bendito, que no pueda llegar al despertar completo si, cuando lo haya hecho, los bodhisattvas de las tierras de Buda a lo largo de las diez direcciones que escuchan mi Nombre no bailen con alegría y entusiasmo, practiquen de todo corazón y en consecuencia obtengan un inmenso mérito”.

Entonces, aquí la alegría y el entusiasmo, la práctica incondicional y el gran mérito van de la mano; y la alegría y el entusiasmo son lo primero.

La alegría y el entusiasmo son la práctica. Cuando nos refugiamos de forma profunda, nuestra energía se libera. La razón por la que no estamos alegres la mayor parte del tiempo es porque la energía está reprimida. A veces se ve frenada por sucesos del mundo real: pérdidas, decepciones, fracasos; a veces está reprimida por nuestras propias imaginaciones ansiosas, nuestro miedo al futuro; a veces por resentimientos y asuntos pendientes del pasado.

El Buda no dice que uno debería ser feliz artificialmente, o fingir estar feliz cuando no lo eres. Es importante ser natural, pero también es valioso aprender a no aferrarse a cosas que ya han pasado y desaparecido, ni tener un miedo irracional a cosas que no han sucedido.

Vivimos tiempos difíciles, algunos estamos enfermos, algunos tenemos familiares que se encuentran en condiciones calamitosas, todos vivimos con diversos grados de restricción respecto a nuestras libertades anteriores. Este tipo de cosas son todas reales y cada uno, naturalmente, tendrá sentimientos sobre ellas. Eso es natural, eso es normal.

Al mismo tiempo, uno no debe olvidar que tenemos el regalo, asombrosamente maravilloso, del Dharma. Cuando realmente escuchamos el nombre de Amida, cuando realmente nos refugiamos, es posible que salgamos de nuestro estado condicionado y bailemos con alegría y entusiasmo, sabiendo que, sean cuales sean nuestras circunstancias, lo mejor que podemos hacer en cualquier caso, en todos los casos, es practicar de todo corazón y dedicar los méritos al bienestar de todos los seres.

Este es el Dharma: hacer lo que sea necesario, hacerlo bien, hacerlo en beneficio de todos los seres. Entonces, incluso en esos momentos en los que estamos llenos de dolor por razones reales, todavía habrá una corriente más profunda de garantía, un depósito de seguridad en lo profundo de nuestro corazón, una verdadera atención plena (mindfulness) que nos transportará a través de todo el dolor y dificultad y nos enviará hacia el Dharma que está más allá de todos estos estados transitorios.

La pandemia es impermanente. Las vidas son impermanentes. Todas las condiciones mundanas son impermanentes. Pero más allá de todo esto, hay una “paz y una restitución que supera los placeres de los cielos” (Voto 33).

Namo Amida Bu
Muchas gracias
Dharmavidya

You need to be a member of David Brazier at La Ville au Roi (Eleusis) to add comments!

Join David Brazier at La Ville au Roi (Eleusis)

Email me when people reply –