Podcast de Amida Shu 03: 8 de abril de 2020: traducido por Nando Maril
Hoy, 8 de abril, en la tradición japonesa, es decir Zen, Tierrapura, etc., es el cumpleaños de Buda. El cumpleaños de Buda, el 8 de abril, es el Festival de las Flores. ¡Muchos felices retornos, Buda!
Bueno, ciertamente Buda regresa muchas veces a mi mente. De hecho, de una forma u otra, está ahí casi constantemente, todo el tiempo, a veces más conscientemente que otras, pero siempre ahí en algún lugar, en segundo plano, en primer plano. ¡Ahí estás Buda! Brillante. Como un resplandor de felicidad.
Irónico que, en cierto modo, decimos Namo Amida Bu para reconocer la presencia de Buda. Lo decimos en ocasiones felices. Te encuentras con un amigo: ¡Namo Amida Bu! ¡Oh, Namo Amida Bu! Cuando sucede algo bueno, algo agradable, Namo Amida Bu. Incluso cuando firmamos un correo electrónico, Namo Amida Bu. Es como decir, "Te mando un poco de amor", "Te mando un poco de sol". Pero, por supuesto, también decimos Namo Amida Bu cuando pasa algo malo. Podría ser algo pequeño, como si se te cayera un plato, el plato se estrella contra el suelo, ¡Oh! Namo Amida Bu.
Esto trae ecuanimidad, decimos. Esa es una palabra importante, ¿no? Ecuanimidad. Paz. Incluso en medio de un pequeño desastre, ¡Namo Amida Bu! Entonces, en medio de ese disgusto, ese sufrimiento, dukkha, en lugar de dukkha huyendo hacia el deseo, la ira, la negatividad de un tipo u otro, ¡Namo Amida Bu! Entra un poco de luz de Buda. Incluso en un pequeño desastre como ese hay una enseñanza, hay dharma. Aquí está la impermanencia. Aquí está la realidad de lo cambiante. Esta es una puerta. Lo cambiante es una puerta a toda práctica. Si no hubiera cambios, no podría haber ninguna práctica, no habría desarrollo, nada bueno podría suceder aquí en medio de este mundo.
Así que Namo Amida Bu, sol en medio de las nubes. Por supuesto, a veces hay desastres más grandes. Estamos en medio de un gran desastre en este momento, un desastre para los humanos, de todos modos. Esta pandemia se extiende por todo el mundo, miles de personas mueren. Horrible, espantoso. Tanto dolor, tanta agonía, tanta aflicción. No estoy en el grupo de mayor riesgo, pero estoy en un grupo de riesgo debido a mi edad, daño pulmonar y ese tipo de cosas. Así que me imagino a mí mismo, tal vez me lleven al hospital, tal vez me sometan a cuidados intensivos, tal vez allí me conecten a una botellla de oxígeno y todas esas cosas. Bueno, ¿qué puede uno decir? Namo Amida Bu. Eso es todo lo que puedes decir. Incluso en esa situación, deja entrar la luz de Buda. La gran compasión, el amor, la misericordia de Buda entra, entra. Namo Amida Bu.
Recuerdo cuando estaba en el hospital, no hace tanto tiempo, que así era. A veces fue muy doloroso, me dieron esas horribles inyecciones en las piernas, muy dolorosas. Namo Amida Bu. Hace que todo sea soportable de cierta manera. Abre algo, abre algo. ¿De qué se trata? Abre tu corazón. Abre tu corazón al amor, la compasión y la paz. De eso se trata Namo Amida Bu. Esa es la presencia de Buda. Eso es Buda retornando felizmente muchas veces. Muchos retornos felices a mi vida.
Así que en este día, que es el cumpleaños de Buda, lo estoy celebrando. Muchos felices retornos de Buda. Muchos felices retornos para todos los Budas, todos los Budas en todas partes. Muchos retornos felices. ¡Feliz cumpleaños!
Muchas gracias.
Namo Amida Bu
Dharmavidya
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