Podcast de Amida Shu 01: 4 de abril de 2020: traducido por Nando Maril

Aquí en Francia, el bloqueo se encuentra ahora en su día 18. La gente tiene muchas reacciones diferentes a esta situación. Algunas personas tienen miedo, algunas personas tienen mucha ansiedad, algunas personas están deprimidas. Algunas personas sienten una especie de alacridad, de exuberancia. Se les libera de sus responsabilidades normales, hay una especie de libertad en no tener que ir a trabajar, etc. Otros, por no tener que ir a trabajar, están muy preocupados y ansiosos. ¿Qué va a pasar con sus ingresos? ¿Van a poder sobrevivir? ¿Podrán recoger los pedazos cuando todo esto termine? ¿Alguna vez terminará todo? ¿Estamos entrando en una situación diferente, un tipo diferente de orden social? ¿Se mantendrán algunas de las cosas que están sucediendo ahora o simplemente desaparecerán y volveremos a trabajar como antes?

Todo el mundo tiene una reacción única a la situación actual y echar un vistazo a nuestra reacción personal puede decirnos mucho, puede ser muy útil, puede ser un buen reflejo. Es una buena meditación, una mirada hacia adentro, un naikan si quieres. Podemos ver lo que sucede dentro de nosotros en relación con lo que sabemos, lo que escuchamos en las noticias, lo que escuchamos de nuestros amigos. Quizás conocemos a alguien que está en el hospital, quizás estemos emparentados con alguien que está en el hospital. Quizás alguien que conocemos haya muerto. Podemos tener miedo por nosotros mismos, podemos estar ansiosos por los demás, etc. Pero desde un punto de vista espiritual, desde el punto de vista de la práctica, la fe... este es un momento en el se prueba nuestra fe. Este es un momento en el que descubrimos mucho sobre la realidad de nuestra fe

Es muy fácil unirse a un grupo, adoptar una idea, pasar el rato con gente agradable y todo eso, y pensar que hemos entrado en una fe, una práctica, un compromiso de algún tipo, pero ciertamente no sabemos si es real o no hasta que se pone a prueba.En mi caso, estoy feliz, mi fe se ha mantenido en esta situación. No tengo miedo, no me siento deprimido, no estoy derrotado por esto. Podría decirme a mí mismo: "Bueno, sí, está bien, pero estás sano en este momento, ¿qué pasaría si contraes la enfermedad?" aunque también sé que solo han pasado dos o tres años más o menos, desde que yo mismo estuve en el hospital con una enfermedad que amenazaba mi vida y sé que mi fe también se mantuvo en esa situación.

Entonces esta experiencia de nuestro propio proceso puede darnos confianza - me da confianza, ciertamente me da confianza - me hace sentir que pase lo que pase, se me dará lo que necesite para manejarlo, para ser un servidor fiel, como lo fui, en la nueva situación, cualquiera que sea la nueva situación. Aunque permanezca aislado aquí durante mucho tiempo, sin ver a ninguno de mis amigos; aunque me lleven al hospital y me conecten a un montón de tubos y máquinas y sufra mucho dolor y todo eso, aunque realmente muera, confío en que pase lo que pase estaré bien. Estaré bien espiritualmente. Mi cuerpo puede sufrir, pero estaré bien en mi corazón, en mi mente, en mi espíritu. Esto se debe a la fe que tengo. Todo esto se debe a Namo Amida Bu.

Namo Amida Bu, la única cosa que es real y verdadera. Todas estas otras cosas son condiciones, todas son circunstancias, son cosas que pasan. Son cosas que nos afectan y luego siguen adelante. Seguimos adelante, ellas siguen adelante. ¿Quién sabe qué vendrá después? No tenemos el control de la situación. Está bien. La gran aceptación es la naturaleza del Buda Amida y, como sirviente y discípulo del Buda Amida, puedo tener fe y puedo estar a gusto incluso en esta situación. Espero que tú también puedas.

Muchas gracias.
Namo Amida Bu
Dharmavidya

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