(Publicado por David Brazier el 4 de enero de 2017 en “Questions in the Sand”)

PREGUNTA: Quisiera saber cómo podría tratar el mal karma y los engaños que me causan  gran dolor, si existen o no prácticas o formas de canto para recibir beneficios en esta vida

RESPUESTA CORTA: El nembutsu proporciona un beneficio inconmensurable ahora y por siempre.

RESPUESTA MÁS LARGA: Hay dos tipos de sufrimiento  del karma. Uno es aquel en el que las condiciones de la vida se presentas adversas. El otro es aquel en el que nos hallamos adheridos a viejas heridas, derrotas, heridas del amor propio, rechazos y demás, crueldades que, no estando ya activas, son muy difíciles de dejar atrás. La salmodia del nembutsu alivia  ambos tipos

En el caso de circunstancias adversas, dirigir la mente hacia Amida nos da una visión más amplia de las cosas. Las dificultades presentes se ven como transitorias y relativamente menores – como parpadeos del sistema cósmico. Cuanto más profundamente  tomamos refugio, menos importante nos resulta la propia pobreza u opresión de las circunstancias. Cuanto más clara nos resulte tanto nuestra propia naturaleza bombu como la de los demás, más comprensión  experimentaremos hacia toda la humanidad. Como en todas las escuelas de budismo, los beneficios se derivan del hecho de quitarse mérito y cuidar de los demás – amor, compasión, alegría compasiva y ecuanimidad.

En el caso del apego al pasado, la práctica del nembutsu nos permite conocer que la gracia se manifiesta precisamente en seres que atraviesan un estado como el nuestro. No tenemos especial necesidad de desprendernos de nuestro pasado. De hecho, hemos sufrido muchas más humillaciones de las que creemos. El karma es insondable y hemos sido maltratados de infinitas maneras. Las lágrimas que hemos derramado, durante eones de tiempo, llenarían océanos.

Por tanto el nembutsu nos brinda beneficios de todo tipo. Nos hace partícipes de una comunidad de compasión y de amor, tanto aquí como en el más allá. Cuando nos dirigimos a Amida recibimos las infinitas bendiciones de Tathagata. Esta es la promesa del Buddha, así que podemos confiar en ella por completo. En cuanto al presente, sentimos alivio. En cuanto al pasado, hacemos nuestra ofrenda  a los Budas – saben mejor que nosotros qué hacer con ello. En cuanto al futuro, nos sentimos a salvo. Todo está completamente a salvo. Namo Amida Bu.

You need to be a member of David Brazier at La Ville au Roi (Eleusis) to add comments!

Join David Brazier at La Ville au Roi (Eleusis)

Email me when people reply –