Podcast GS9: 2 de enero de 2021: traducido por Nando Maril
Es año nuevo. Por supuesto, esto es completamente arbitrario. No hay ninguna razón particular por la que este momento deba ser un comienzo ni un final. Un momento sigue a otro. Cada uno es especial a su manera. En cierto sentido, el año nuevo es algo completamente arbitrario. Los planetas siguen girando, la Luna tiene sus fases, las cosas cambian continuamente. Pero aún así, nos gusta tener algo de estructura. Nos gusta tener una estructura para nuestra vida. Nos gusta establecer puntos finales y puntos de inicio, etapas por las que podemos pasar. Esto nos permite mantener cierta sensación de progreso, alguna sensación de avance, logro, nos da la posibilidad de establecer metas y alcanzarlas, o fracasar, según sea el caso.
Entonces, para ser realistas, debemos mantener cierta proporcionalidad. Por un lado, alguna estructura es útil, por otro lado, siempre hay un elemento en ella que es solo fantasía. Tomemos algo como el dinero. El dinero no existe realmente. Solo existe en la imaginación de los humanos; y luego tenemos trozos de papel o trozos de metal, que representan esta sustancia inexistente, y estos se vuelven enormemente importantes para nosotros.
Lo mismo ocurre con la nacionalidad. Un pájaro que vuela desde Francia a Alemania o a Suiza o a Italia o... no tiene idea de que está cruzando una frontera, no hay nada allí que diga: "Este es un gran cambio". No en la naturaleza. Solo en la mente de los seres humanos y, sin embargo, ¿no tenemos enormes jaleos por eso? Muchas personas han muerto por disputas sobre dónde está realmente esa línea. Pero es una completa fantasía.
La vida humana es así. Gran parte de la vida humana se estructura en torno a fantasías, que se han vuelto muy importantes para grupos de personas, y debemos tomar buena nota de ello. No es bueno decir: "Bueno, no reconozco el límite entre este país y otro", porque no por ello te dejarán pasar los funcionarios de inmigración. Todavía tendrás que obtener tu visa o lo que sea necesario. De hecho, los humanos se han creado una gran cantidad de inconvenientes y problemas al establecer estas barreras, límites y todas estas estructuras fantasiosas que gobiernan nuestra vida social.
Una persona espiritual debe tener en cuenta las "realidades" de este mundo de fantasía. A veces, si eres una persona espiritual, la gente se te acerca y te dice: "Sí, pero ¿qué pasa con el mundo real?" Bueno, cuando piensas en lo que quieren decir con el "mundo real", gran parte de él es fantasía. Como persona espiritual tienes que tenerlo en cuenta, pero al mismo tiempo tienes que ser consciente de que es solo una ilusión. Puede ser una ilusión útil, pero sigue siendo una ilusión. Entonces, aunque tu vida social pueda estar estructurada de esta o aquella manera, tu espíritu no está obligado a quedar atrapado por ella. Y este es tanto el caso en una organización espiritual, una iglesia, una religión, como en la sociedad en general. Las estructuras, a veces, son muy útiles para permitir buenas relaciones, conexiones, etc. y a veces son solo un obstáculo. A veces, se emplean más y más personas para evitar que otras personas hagan cosas. Pero así es como somos los seres humanos y con eso tenemos que vivir.
Namo Amida Bu
Muchas gracias
Dharmavidya
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