Podcast GS45: 21 de septiembre de 2021: traducido por Nando Maril
Hoy me gustaría decir algo sobre el elemento tierra. Me gustaría hacer algunas reflexiones sobre este tema. El Buda Śākyamuni habla a menudo de los elementos y, por lo general, comienza hablando del elemento tierra.
El budismo es bastante práctico y bastante psicológico en este sentido. Tiene mucho que ver con la percepción, lo que percibimos y cómo lo percibimos; y si cambiamos la forma como vemos las cosas, entonces, por supuesto, cambiamos nuestras vidas. En última instancia, podríamos liberarnos por completo.
El elemento tierra es el lugar desde el cual el Buda comienza, a menudo, con sus enseñanzas, porque gran parte de lo que percibimos está normalmente dentro de esta categoría de elemento tierra. Solo mira a tu alrededor, yo miro alrededor de mi habitación ahora, puedo ver mi estantería, bien... es un gran trozo de elemento tierra. Es sólida. Eso es lo que se pretende decir. Las cosas sólidas son el elemento tierra.
Por supuesto, la ciencia nos dice que estas cosas no son tan sólidas como parecen, que hay más espacio que materia dentro de cualquier objeto aparentemente sólido. Pero para nosotros, bajo nuestra percepción, lo que encontramos es un objeto sólido y ¡nos topamos con él!, puedes golpearlo con tu dedo del pie y duele. Está ahí y no es tú, no es yo. Ya sabes, cuando me golpeo el dedo del pie con una piedra en el jardín, la piedra no es yo.
Esta era una reflexión mía muy temprana, cuando tenía cinco años solía sentarme en el jardín y mirar una piedra. Me desconcertaba; solía preguntarme: "¿Por qué me detengo en la punta de mis dedos y por qué mi ser, o mi conciencia, o mis sentimientos no se extienden en esa roca?" La roca debe tener vida propia, debe ser algo dotado de su propio ser, por así decirlo. Para tener cinco años ese era un lenguaje de adulto maduro, aunque esa era la esencia de mi sentimiento al mirar la roca. Supongo que fue entonces cuando empecé a meditar, aunque no supiese en aquel momento que se llamara meditación. Pero fue una reflexión primordial sobre "¿Cuál es la naturaleza de nuestro ser?" Aquí es donde empezamos. Partimos de esta realidad existencial. “Estoy aquí, en este mundo, rodeado de cosas del elemento tierra, que encuentro, que no son yo, sobre las que no tengo control. No puedo desear que la roca sea algo que no es". Y a su debido tiempo, podría reflexionar que incluso en mí mismo hay huesos y no puedo, por un acto de mi mente, hacer un hueso más grande, o más pequeño, o más blando, o más duro. Es lo que es.
Por supuesto estoy aquí en la Tierra, el planeta, en donde estamos en este gran trozo de elemento tierra, bueno, decimos grande porque somos muy pequeños pero, en la escala del cosmos, el planeta Tierra es casi nada. De esto podemos obtener un sentido de proporción, un sentido de humildad y también un sentido de gratitud. Aunque estas son cosas con las que nos topamos, con las que nos enfrentamos, no podríamos tener el ser que tenemos sin ellas. Si no tuviera la tierra, no habría nada sobre lo que posarse. Yo no estaría aquí. Por tanto, somos dependientes, somos dependientes del elemento tierra, que no es yo, no es mío, no es yo mismo. Es externo, es un poder del universo que es distinto al yo.
Este es el elemento tierra y reflexionar sobre él, meditar sobre él, es un ejercicio espiritual muy valioso.
Namo Amida Bu
Muchas gracias
Dharmavidya
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